01 enero, 2016

Carta para ti, en este año nuevo.



                                                 Querido lector:
Este año ha terminado ya. Seguramente, muchos cambios han ocurrido en tu vida. 
La verdad, no tengo idea de qué o cómo pudieron ser esos cambios, lo único que sé es que, aun cuando yo sea menor de edad y me falten veintidós días para cumplir los diecisiete, te entiendo muy bien.
Pero esta vez, no vengo a hablarte de mí. Este no es es el propósito de esta entrada. 
Sé que pasaste dificultades y alegrías. Quién sabe, quizá practicaste un nuevo deporte, hiciste más ejercicio, encontraste en trabajo, no reprobaste todas las materias, encontraste mejores amigos, te quedaste en la Universidad que querías, recibiste buenos regalos de Navidad, empezaste a hacer vídeos en Youtube, te lanzaste a escribir un blog, un diario, un ensayo, un libro, poemas. Escalaste una montaña, leíste más libros, te lanzaste de un paracaídas, fuiste de viaje a países increíbles, estuviste más tiempo con tu familia, tuviste un hijo o una hija, te casaste, encontraste novio o novia, tiraste a la basura todas las malas vibras, te reíste de lo bueno... ¡qué se yo! 
Sé que pasaste por dificultades y sé que probablemente hubo momentos de caos -sí, por que a veces llegan- donde te sentiste herido, triste, decepcionado, algo te dejó impactado, algo te llevó hasta abajo. Algo que te sacó lágrimas y te dejó recostado sobre tu cama. Algo que hizo que necesitaras ayuda, consejos, abrazos, caricias y amor.
Probablemente te sentiste vacío, perdido o solo. Pensaste en quién eras, qué querías, para qué estabas ahí, aquí y ahora.
No sentías que hubiera un propósito palpable en tu vida. "¿Cuál será mi huella en este mundo? ¿Para qué estoy aquí vivo? ¿Quién voy a ser en unos años?".
Recuerdo que en una charla a la que fui, lo que dijo un conferencista me impresionó: 
"En el corazón, todos los humanos tenemos un vacío tamaño Dios. ¿Y saben quién es el único que puede llenarlo? ¡Solo Dios!".
Espero que en este año hayas encontrado todo lo que buscabas, y que tus sueños se hayan hecho realidad, que hayas tenido felicidad y paz.
Espero también, que hayas encontrado a Jesucristo. Y si no los has hecho y estás sintiéndote terriblemente solo, decepcionado, triste por tus circunstancias o aún si estás sintiéndote a desbordar de felicidad, espero que puedas confiar en Él. No como una religión, no como un "espirítu", no como un rezo vano y robótico que se repite una y otra vez sin siquiera saber qué es lo que estás diciendo.
Jesús no es nada de eso. La diferencia entre la religión y ser seguidor de Jesús (o cristiano) es que la religión está en la boca y en la mente y seguir a Jesús está en el corazón.
Porque tal como lo dice esta imagen de la izquierda, Jesús es como una computadora.
Él ENTRA en tu vida, ESCANEA tus problemas, EDITA tu tensión, DESCARGA soluciones, BORRA tus angustias y te SALVA.

No hay cosa más increíble en la vida que saber que Alguien nunca en la vida se irá de tu lado, te defenderá, será el hombro en donde puedas llorar, te consolará y  te dará lo que nunca podrías imaginar.

Yo no soy quien te hará cambiar de opinión, no estoy aquí para cambiar tu mente o lo que sea que sientas, solo te doy un consejo.
Dios te creó con un propósito más grande que solo pensar en ti mismo. Dios te ama tanto que envió a Jesús, su único Hijo, a morir por ti. Y si morir por millones y millones de personas no es prueba de amor suficiente, dime qué lo es.
Querido lector, 2015 ya terminó. Se ha creado una barrera imaginaria entre un 31 de diciembre de 2015 y un 1 de enero de 2016. Todo ha cambiado y ha sido hecho nuevo. Tus cargas se han quedado en el ayer, en el año anterior. Todo lo que viviste está en tu memoria. Tus alegrías se quedarán colgadas en tu corazón, pero es momento de dejar ir todo lo malo. Tristeza, decepción, lágrimas y desánimo. Es momento de hacer un cambio. Y probablemente, es momento de encontrar al Jesús que no está en rezos repetitivos ni en robots diciéndolos.
Espero con todo el corazón que puedas hacerlo. Espero que este año tengas más de lo que deseas, pero más que nada, deseo que este año encuentres lo mejor de todo el camino: A Jesús.




Con mucho amor y buenos deseos,




No hay comentarios:

Publicar un comentario