05 noviembre, 2014

Aveces la vida te juega una broma... o es Dios dándote una segunda oportunidad...



Título: Un Largo Camino a Casa (Long Journey Home).
Autor: Sharlene MacLaren.
Editorial: Whitaker House.


Un viudo amargado. Una chica divorciada y lastimada. 
El amor y una segunda oportunidad.

La historia nos habla de dos jóvenes.
Daniel, que es un joven viudo, cascarrabias y amargado. Era  pastor de una iglesia cristiana evangélica y  está escapando de su destino, sus recuerdos...y de su pasado. Se muda al lado de quien volverá a plantar en su corazón sentimientos que ha olvidado.
Clara, una joven divorciada, lastimada y golpeada de todas formas vive con su pequeña hija, tratando de olvidar el pasado y comenzar un nuevo presente con alegría. Ella comienza a notar al hombre que es su vecino, y comienza a preguntarse qué es lo que siente.
Y Dios, quien es el único Dios verdadero que ofrece siempre segundas oportunidades y nos da un futuro y esperanza.


La historia me cautivó desde el primer instante. Te atrapa de forma sorprendente -e instantánea.
¿Quién no quisiera un hombre como Daniel? Extraño y perdido, pero muy tierno y apasionado por las personas que ama.

Daniel está escapando. Escapando de sus recuerdos, de su pasado. Se muda y encuentra los sentimientos que había olvidado. 
La historia, aunque simple, es una delicia para saborear tanto en un día soleado como también en un día nublado capaz de hacernos hibernar. Me encantó cómo MacLaren hila todo en una buena historia. Cómo atrapa al lector con tanta simpleza y dulzura. 
Clara es una mujer fuerte, pero lastimada por su anterior esposo. A pesar de que el título hace que pensemos "este es un libro de viejitos muriendo de amor", no es así. Son jóvenes, 29, 30. En realidad no son tan grandes, no son tan adultos.
Los sucesos nunca te decepcionan. Con este libro puedes llegar a sentir dolor, emoción, te hará llorar y lo más importante que tienen todos los libros de inspiración o en español, cristianos-románticos, es que te harán aprender. No sólo de Dios o Sus promesas, si no de la vida misma y cómo ver esta vida de una manera divertida y práctica, con principios que a veces vienen más de la sabiduría y sensatez que de la religión. Recordemos que la religión no es una amistad con Jesús o conocer a Dios, no de Dios.

A mí en lo personal me ha gustado mucho. Me ha enseñado más sobre las segundas oportunidades que da Dios. 
Me ha enseñado de la fortaleza. Que todo tiene un por qué. Las dificultades nos harán más fuertes, los problemas nos servirán de algo; son para madurar, seguir, saber. Las personas a quienes conocemos, siempre las conoceremos para algo y por algo. No sabemos qué nos diga Dios, o cuáles sean Sus Planes tanto para ellas, como para nosotros.
Encontré que el amor es el más grande regalo de Dios y que, tal como Dios siempre está ahí esperándonos, llamando a nuestro nombre hasta que lo escuchemos, así es el amor. Cuando llegue la persona indicada, no tendremos que buscarla, ella misma llegará a nosotros. Encontré que hay segundas oportunidades en la vida, en todo ámbito y que hay una esperanza para todo el que quiere creer.
Gracias a Dios.
¡Por favor, no la dejen pasar! ¡Es una novela buenísima!

Puntuación: 8/10.






No hay comentarios:

Publicar un comentario